Quiero que encuentren su propio
camino
Dead
Poets Society de KLEINBAUM, N.H.
Rosa dejó el libro sobre la mesa y se levantó. Sus
articulaciones protestaron. «¡Estos huesos no me dan descanso!» El peor
momento era por la mañana cuando se levantaba de la cama parecía una vieja que tuviera
cien años, después ya iba doliendo menos.
Cogió el papel de un rojo
intenso con hojas de plata que había comprado para envolver su regalo.
«¡Precioso! Será el marco perfecto».
Acarició el libro. «¡Cuántos recuerdos le traía!» Recordaba la emoción cuando
lo había comprado y un instante después llegó la punzada de la decepción inmensa. «Sí,
pasaban los años pero no se olvidaba».