Me hubiera gustado actualizar el blog con un nuevo relato antes de Navidad pero en estas fechas todo parece volverse urgentísimo y para ya, eso ha hecho que me resultara imposible hacerlo.
¿A vosotros también os pasa? Antes de las vacaciones, a final de año... De repente es como si no hubiera un mañana, como si no existiera el día después y está el de después, el otro y el otro hasta completar los 365 o 366 si es bisiesto.
Así que a falta de relato he decido hacer mi particular felicitación para estas fiestas, deseando lo mejor para todos vosotros en estos días y para el nuevo año.
Son fechas especiales, con luces y sombras pero se diría que las ciudades quieren mostrar su imagen más luminosa y a mi me gusta mirarlas con ojos de niña.
Y a su lado la preciosa Casa Amatller de Puig i Cadafalch, sin apenas iluminación, parece mirar sin resentimientos a su famosa vecina.